Desde hace tiempo, los movimientos animalistas vienen interviniendo en la conversación pública y son cada vez más visibles en las protestas sociales. Podemos encontrar en ellos una transposición de la idea de que «un pueblo que oprime a otro no puede ser libre» a «una especie que oprime a otra no puede ser libre». ¿Cómo debería redefinirse el vínculo entre seres humanos y animales? ¿Qué tiene para decir el animalismo? ¿Cómo (re)pensar estas temáticas en el contexto de la pandemia de covid-19?